Desde junio de 2017, la FIFA implementó una modificación que establece sanciones distintas para este tipo de situaciones, pero en julio de 2021 se produjo un ajuste adicional.
Desde 2017, los árbitros tenían la autoridad para señalar un penal por contacto con la mano dentro del área, incluso si todos los jugadores protestaban, reclamaban o argumentaban que fue «sin intención». El árbitro que pitaba la pena máxima se respaldaba en la normativa de la FIFA, que indicaba: «Tocar el balón con la mano implica la acción deliberada de un jugador de tocar el balón con la mano o el brazo», aunque con ciertos matices.
Un ejemplo de esto ocurrió durante la Copa América 2019, cuando Arturo Vidal remató a gol, pero la pelota golpeó primero en la extremidad de Guillermo Maripán. A pesar de los numerosos ejemplos de este tipo, en julio de 2021 se implementó un cambio que, en teoría, debía abordar muchos problemas o injusticias.
¿En qué consiste esta modificación en las reglas? Antes del 1 de junio de 2016, si un jugador extendía los brazos durante un salto en el área y la pelota le golpeaba en la mano, el árbitro era quien interpretaba la jugada y decidía si había intención o no de desviar el balón. Posteriormente, si un jugador ampliaba el volumen de su cuerpo con los brazos y la pelota le golpeaba, se marcaba como penal.
A partir de la temporada 2021/22, la International Football Association Board (IFAB) determinó que, desde el 1 de julio, la mano involuntaria o accidental que precede a un gol o genera una jugada de peligro ya no se considerará una infracción.
Lo que establece el reglamento:
- Se considerará infracción cuando un jugador toque deliberadamente el balón con la mano o el brazo, por ejemplo, moviendo la mano/brazo hacia el balón.
- Se considerará infracción cuando toque el balón con su mano/brazo y haya agrandado su cuerpo de manera no natural.
- Se entenderá que un jugador ha agrandado su cuerpo de manera antinatural cuando la posición de su mano/brazo no sea consecuencia o pueda justificarse por su movimiento corporal en esa situación específica. Al tener su mano/brazo en dicha posición, el jugador corre el riesgo de que su mano/brazo sea golpeado por el balón y, por lo tanto, sea sancionado, incluso si anota en la portería contraria.
- Se considerará infracción cuando marque un gol en la portería contraria directamente con su mano/brazo, aunque sea accidentalmente, incluso si es el guardameta.
- También será infracción si marca inmediatamente después de que el balón haya tocado su mano/brazo, incluso si es accidental.