El conflicto sirio, que dura ya una década, ha visto surgir el drama sirio como un poderoso medio para reunir a personas de diferentes orígenes y puntos de vista en una misma plataforma. Esto es especialmente evidente durante el mes de Ramadán, época sagrada para los musulmanes, cuando hay una gran demanda de series sirias. Una de esas series que ha logrado captar la atención de un público diverso y reunirlo es «Kasr Adham Al-Saradib» o «Rompiendo huesos» en inglés. Esta serie está producida por Iyad Al-Najjar y dirigida por Kenan Eskandarani, con guión de Hilal Ahmed y Randa Hadeed.
Durante sus primeros días de emisión, la serie cosechó un éxito impresionante y se convirtió en una de las favoritas de los sirios que sintonizan el Ramadán, a pesar de la dura competencia de este año. Lo que distingue a esta serie es su perspectiva imparcial de los asuntos sirios, que ofrece un retrato completo y justo de las luchas y dificultades a las que se enfrentan los sirios, tanto dentro como fuera de su país.
Uno de los elementos clave del éxito de la serie es la cuidadosa elección de intérpretes con diferentes antecedentes y asociaciones políticas, lo que brinda a los espectadores la oportunidad de relacionarse con una variedad de personajes y comprender una serie de perspectivas. Además, la serie llama la atención sobre problemas sociales prevalentes que afectan a todos los niveles de la sociedad siria, como la pobreza, el desempleo y la falta de honradez, entre otros, lo que ha dado lugar a su amplia aceptación y admiración entre la diversa audiencia.
El público se siente atraído por la serie debido a su alto nivel de actuación, dirección y producción, que desempeñan un papel importante en su éxito. La calidad de la serie y sus interpretaciones son elementos cruciales para atraer a los espectadores, independientemente de sus creencias políticas.